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- 30 oct
El ‘selfie’ más potente
Ayer miércoles, los diputados de Esquerra en el Congreso se hicieron una foto en la cámara española, ellos con unas papeletas para votar el 9N y con Mariano Rajoy al fondo, hablando desde el atril. Alguien ha dicho que fue un selfie. Pero no. El selfie es lo que de toda la vida de Dios conocemos como un autorretrato, así que si miramos la foto veremos claro que ninguno de los tres protagonistas no hizo la instantánea y por lo tanto aquello no era un autorretrato. Alguien otro la hizo por ellos. Por lo tanto, aquello no es un selfie, como en cambio sí que lo es, un autorretrato con todas las letras, lo que protagonizaron ayer en el Parlament un grupo de individuos, uno de ellos levantando el brazo y haciendo el saludo fascista y chillando “¡Viva España!”, y todos, previamente, gritando desde la zona de invitados contra la independencia y aplaudiendo las intervenciones de los diputados de Ciutadans y del PP contra el 9-N. Entre ellos, gente de Vox (el ex-partido de Alejo Vidal-Quadras) y del PP. De hecho, posteriormente Alícia Sánchez-Camacho evitó condenar este despropósito, y así completó el autorretrato de este submundo. Ellos solitos, con sus manitas.
Y esto, de los de la factoría de frases-eslogan tan reiteradas como “en Catalunya hay miedo a expresarse” o “en Catalunya no hay verdadera libertad”. Bien, el caso es que miedo a saludar en plan fascista tendría que existir tanto como poca libertad para hacerlo, y menos en la cámara donde reside la soberanía popular, que merece un plus de respeto, evidentemente para quienes le reservan alguno. Para quienes no creen en él, evidentemente, aquello es un recinto donde se podría hacer de todo, incluso convertirlo en un circo con freaks y monstruos como los dinosaurios por vocación con cerebro de mosquito que ayer perpetraron el incidente en la cámara catalana. Y después algunos de estos hacen fotomontajes en internet comparando a Artur Mas con Hitler o dicen que aquí hay “nazionalistas”. ¡Qué ristra de casos de proyección tan explícitos y que tanto piden a gritos de estudio psicológico!
Que la oposición al 9-N acabe uniendo a gente que está legítimamente por la no independencia con especímenes de esta calaña es lamentable e injusto para mucha gente anti-independentista o españolista sin más. Ahora bien, con la perspectiva del tiempo veremos claro (ellos también) el error histórico que los contrarios a la independencia han perpetrado al identificarse con el no-voto y regalar al soberanismo la bandera del sí-voto, anexa a la del sí-independencia. Porque la caspa más cutre y el españolismo más rancio está para impedir como sea, y por la fuerza que lo harían si pudieran, que el pueblo de Catalunya pueda decidir en libertad su futuro. Y los hay que se están retratando con ellos, todo solitos, sin ayuda de los otros, con el selfie más potente (y triste) que nunca habrán protagonizado.
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