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- 28 may
Alejo, Duran y el Espanyol
¡Qué espectáculo más denigrante y lamentable que se vivió en el Estadio de Cornellà-El Prat, este fin de semana! Bueno, al final es a lo que nos tienen acostumbrados unos jugadores que contra el Barça siempre despliegan su fútbol más destructivo, y una parte de la afición del Espanyol que confunde rivalidad con odio y competición deportiva con antideportividad. Se quejan mucho y hacen mucho ruido en los medios, cuando en realidad lo deberían hacer en el césped y en la clasificación, donde no pasan de ser una medianía bastante mediocre. Pero en los medios triunfan, se tiran de los pelos a la mínima haciéndose los ofendidos y tiran de una clarísima sobrerrepresentación que los medios de nuestro país también regalan a otros, por ejemplo en la esfera política. Es el caso de Alejo Vidal-Quadras y Josep Antoni Duran Lleida.
Estos días se vuelve a hablar, de Alejo. Y le hacemos la campaña gratis. ¿O que se piensan quizás que ahora va a El Gran Debate de Telecinco y todo el día desfila por programas de la caverna y que la dice gorda (aún más de lo habitual en él) por casualidad? Si es así, acaben de mamarse a rápido el dedo, expúlsenlo ya de la boca y escuchen: este señor se presentará en solitario (sin el PP, con otros en la derechísima de este partido) en las próximas elecciones europeas. Está haciendo campaña. Y los medios participamos satisfechos en ella. Pero, ¿y quién es en Vidal-Quadras? ¿A quién ha marcado un gol este señor en la última década? ¿A quién representa en nuestro país? Así, pues, ¿por qué le damos una importancia en los medios que no tiene? ¿Para alimentar más a la bestia? ¿Pensamos que hay que promover mucho más ejemplares de esta especie para convencer a catalanes sobre la opción de la independencia? ¿De verdad? ¿Es necesario?
Y sobre Josep Antoni Duran i Lleida, sólo un consejo: que sus teóricos adversarios no le sigan haciendo la campaña permanente en la que ha convertido su longeva carrera política. Abre la boca y se le caen los palos por todas partes. Dice una frase que en labios de otro (de CiU mismo) no tendría mayor importancia, y parece que se vaya a acabar el mundo. No es así, pero de esta manera los que se erigen en antagonistas suyos en ERC, en Convergència y donde sea del soberanismo aspiran también a un poquito de cuota de pantalla, para así tratar de marcar perfil y decir “¡oh, mira qué patriotas somos nosotros y qué traidor es Duran! “. Y no sería necesario tirar de eso. Nos lo podríamos ahorrar. Porque lo que dice Duran, como lo que chilla Alejo o lo que se perpetra en el césped, en parte de la grada o en el palco del Espanyol está demasiado sobrevalorado, especialmente en los medios. Porque Duran ya puede hablar, que CiU sigue votando en bloque camino del derecho a decidir. Y si algún día esto deja de pasar, CiU dejará de existir, Convergència y una parte maja de Unió irá en una lista con ERC y otros de cara a unas elecciones plebiscitarias, y habremos llegado al final del camino. Fin de la comedia.
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