El factor social

  • El factor social

    Hace pocas semanas, el equipo del alcalde Xavier Trias estaba preocupado. Y no solo porque admitían que a su mandato en Barcelona «le falta relato», sino sobre todo porque consideraban que sus compañeros de partido y vecinos de la plaza de Sant Jaume (lado montaña) no les ayudaban con un perfil «demasiado liberal». Recordemos que Trias se presentó a sus primeras elecciones municipales con el lema L’alcalde catalanista i de progrés y que siempre se ha definido como socialdemócrata. 
    La idea de su equipo es poner en valor ese perfil progre del alcalde, así como unas políticas sociales de su Administración «que por ejemplo hacen posible que en Barcelona no haya persona desahuciada que no tenga rápidamente un techo provisional». Hasta ahora los hombres de Mas no les «ayudaban» demasiado. Ahora consideran que algo se está moviendo «en la buena dirección». 
    Ven así bien el nombramiento de ciertos consellers como Santi Vila (Territori i Sostenibilitat) y Neus Munté (Benestar i Família), que podrían responder a un perfil socialdemócrata. Se suman a quien ya llevaba esta etiqueta de fábrica, el también conseller Ferran Mascarell. Como decía el gran comunicólogoMarshall McLuhan, «el medio es el mensaje». Aquí, el conseller es el mensaje. Al menos en un primer momento. Luego ya veremos si eso se deja notar en la acción de gobierno o si se queda solo en eslogan, como cuando Zapatero creó un ministerio de Vivienda y uno de Igualdad, y nada. 
    Muchos tienen esperanzas depositadas en ello, y no solo en el equipo de un Trias que en Barcelona aspira a comerse una parte del pastel electoral de un PSC con un liderazgo barcelonés que observan muy débil, con Jordi Martí de jefe de la oposición y con un proyecto aún más desdibujado que el del alcalde «y enfrentado con el entorno de Pere Navarro ». En CiU son unos cuantos los que creen que si la federación nacionalista ha perdido cierta centralidad en los últimos años no ha sido por su apuesta soberanista, sino por la proyección de una imagen de «derechización» que no se corresponde con el retrato de su base, de su grueso de votantes y de su vocación política. 
    «Navarro no se corresponde con el perfil duro que le están haciendo asumir. Le han puesto de dos a un Maurici Lucena, que es la línea directa con Carme Chacón, y muchos sectores del PSC se sienten arrinconados». Es el momento de quitar el polvo al factor socialdemócrata que siempre ha estado presente, en mayor o menor medida, en CDC. Hay opción de rascar voto, sobre todo en Barcelona ciudad. Y así se lo ha dicho más de uno (que puede hacerlo) al president .

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