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- 06 may
¿Voto o no voto?
Ayer me sorprendí a mí mismo haciéndome esta pregunta. ¿Voto o no voto? Como nos hemos de ver, ¿eh? Yo, que toda la vida de Dios he estado machacando amigos, conocidos y saludados para que el día de una cita con las urnas no faltaran. Y ahora, de cara al 26-J, creo que por un punto de rabia con la inutilidad política española, pocas ganas que tengo de votar, aunque ya les digo ahora que la pregunta la he contestado rápido y sí depositaré sobre en la urna. ¿Pero exactamente sabemos para qué?
También ayer, una amiga twitteaba en Twitter … “Esos vacíos entre legislatura y legislatura llamados Campañas electorales”. Y yo, al verlo, pensé que un servidor habría escrito “Aquellos huecos entre campaña y campaña llamados legislaturas”. Porque admitiremos que esta mini legislatura española ha sido una tomadura de pelo colectiva y un desproporcionado y caro homenaje a la inoperancia y la politiquería más grotesca y absurda. En el podio, Premio Accésit para Rajoy, Sánchez, Iglesias y Rivera.
Hay legislaturas que por mucho que duren son un fuego de virutas de principio a fin. Un pim pam pum sin sentido y sin ninguna aportación de relieve. Vacío, tristeza. Nada que justifique el desmadrado gasto electoral y política que cargamos encima los ciudadanos de un Estado que mantiene a conciencia un Senado que no sirve para nada. Esto último es un detallito que hace de metáfora de todo lo demás, pero de indicadores que nos lo reconfirman en el día a día no faltan. El hoy finada no-legislatura, este vacío de talento político y de sentido de Estado que nos han regalado sus señorías de Madrid, es uno de esos que marca un antes y un después. De aquellos que desincentivan el voto del más pintado. De mí, por poner un caso.
¿Alguien de ustedes tiene algún ánimo especial o algún estímulo de relieve que lo haga mover el culo del sofá, de la silla de camping o de la hamaca de la playa para moverse a votar este próximo 26 de junio electoral? Yo, que para estas cosas de la automotivación soy rápido, ya he encontrado una. A ver si aciertan. No me ha costado mucho inventarme una porue soy muy de poner imaginación en la vida, y porque tengo claro que hay votos que nos alejan de este proyecto español fallido, y otros que nos hacen cómplices. Pero la duda inicial fue. ¿Voto o no voto? No sé si todo el mundo pondrá tantas ganas e imaginación.
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