Y Duran y Duran y Duran

  • Y Duran y Duran y Duran

     

    Venga, manos a la obra de nuevo a hablar de Duran. Y a abrir diarios y telediarios y boletines de radio y digitales con él. Y Duran y Duran y Duran. Como el anuncio aquel del conejito de Duracel. Y seguramente hay quien no se cansaría nunca de ello, quizás hasta el protagonista, pero la sociedad catalana afortunadamente está en otra fase muy diferente, no en esta de los personalismos y de los nombres y la política de toda la vida. Porque sí, mal que les pese a los protagonistas de siempre, ahora el centro de atención son otros. Las urnas. La gente. Les está costando pero acabarán por asumirlo. De hecho algunos ya se van poniendo a ello.

    ¿Se imaginan un debate en Tv3 entre candidatos de cara a las próximas elecciones catalanas, con Artur Mas y Josep Antoni Duran i Lleida encabezando candidaturas diferentes? ¿Se imaginan a Duran coincidiendo sobre todo con Alícia Sánchez-Camacho y Pere Navarro, recibiendo golpecitos en las espaldas de Albert Rivera, y enfrentándose y haciendo reproches a Mas, frente a frente? Yo tampoco. A pesar de todo, yo no lo veo. Es decir, que lo visualizo mentalmente de forma nítida pero a la vez me cuesta mucho imaginármelo materializándose. Entre otras cosas porque, legado histórico de Unió a parte (que esto de base tendría que pesar y de condicionar toda la acción de su líder de hace 27 años, no 83), ¿en qué puede competir Duran con Mas en condiciones? ¿En juventud? ¿En proyección de futuro? ¿En experiencia de gobierno? ¿En gestión? ¿En defensa de un sistema de financiación justo para Catalunya? ¿En moderación? ¿Verdad que lo ven? Duran también. Así que ya lo tenemos casi todo dicho. Fíjense que ante la hipótesis de su retirada (parcial), se han exclamado y compungido sobre todo en Madrid, y muy especialmente aquellos que entienden entre poco y nada qué está pasando en Catalunya. ¿Y aquí? Básicamente, ni frío ni calor. Claro como el agua.

    ¿Duran sumó a CiU? ¿Claro! A pesar de que no tanto como Juan Carlos I lo hizo a la monarquía. ¿Ahora Duran resta a CiU? Sí, ya hace días, lo sabe todo el mundo. En unos términos similares a como lo hacía el rey en su Casa. Y como Rubalcaba al PSOE y como tantos otros que no por edad, sino por imposibilidad de reciclaje y de adaptación a un nuevo tiempo, a una nueva sociedad y a una nueva política, tendrán que ir cediendo porque su tiempo (que lo han disfrutado dilatado) ya ha pasado. Y es cosa de ellos si lo hacen voluntariamente, con elegancia y por iniciativa propia, o atropellados y empañando toda una trayectoria y aquello de bueno que haya podido tener. Rubalcaba ha optado por la primera opción. Juan Carlos I también. Y Duran es listo como ellos. Así que quizás que no invirtamos muy más rato en ello y lo dediquemos a cosas nuevas, que no cansan sino que ilusionan, y que reclaman de nuestra máxima atención.

    (Para leer el artículo en NacióDigital, clicad aquí)